-¿Qué le pides a la vida?
-No lo sé, supongo que servir mesas e ir tirando.
-Lástima, a la vida hay que pedirle grandes cosas: cruzar Europa en una furgoneta, conocer a tu gemelo del pacífico, cantar ante cienmil personas, o comer palomitas en una buhardilla de París. Aunque lo mas seguro es que la vida te responda con un «otra vez será».
-Entonces, ¿Por qué pedir?
-Porque si pides pisar la Luna, quizás, algun día, consigas una casita en lo alto de una montaña donde verla todas las noches.